Se escuchan numerosos
reclamos de la gente que está cansada de ver a nuestros gobernantes sin vocación
de servicio al pueblo, que no responden al rol de mandatarios o representantes
para el que fueron elegidos, que sólo vemos como resultado de su gestión
negocios personales hechos a costa del estado, corrupción, impunidad,
utilización del poder para fines propios y partidarios, impunidad, compra de
juicios, Habeas corpus, Tribunal Constitucional, etc.
La protesta del ciudadano no está de más en cuanto a manifestación de repudio a la corrupción de los que mal gobiernan la región, pero hay algo que debemos entender si no queremos quedar enredados en la telaraña que nos presenta esta situación, y es que un reclamo sirve si nos basamos en la hipótesis de un gobierno que está equivocado de buena fe en su rumbo o desatiende algún aspecto en forma no intencional. Es decir, como un aviso a nuestros gobernantes para que cambien algo que no están haciendo bien.
La protesta del ciudadano no está de más en cuanto a manifestación de repudio a la corrupción de los que mal gobiernan la región, pero hay algo que debemos entender si no queremos quedar enredados en la telaraña que nos presenta esta situación, y es que un reclamo sirve si nos basamos en la hipótesis de un gobierno que está equivocado de buena fe en su rumbo o desatiende algún aspecto en forma no intencional. Es decir, como un aviso a nuestros gobernantes para que cambien algo que no están haciendo bien.
En este caso, en la
actualidad, no se da tal hipótesis, sino que el gobierno está haciendo
perfectamente lo que tiene el objetivo de hacer, y sabe bien lo que hace y lo
que no, aquí no hay equivocaciones. Se trata de gente corrupta, que no está
tomando un rumbo equivocado, sino que está tomando el rumbo que perfectamente, a
conciencia y detalladamente planificado se puso como objetivo desde que
aparecieron en política, ser ricos a costa de los
pobres.
De la misma manera
que el ladrón que nos acaba de asaltar no va a devolver lo robado, dejar de
robar y entregarse a la Justicia porque se lo pidamos, amablemente,
enérgicamente o como sea; este gobierno corrupto no va a cambiar su rumbo por
los reclamos de la gente honesta, o las denuncias que cansados del saqueo,
hacemos algunos pocos de forma probatoria y esto es algo que tenemos que tener
claro.
No creo que sea en
vano las denuncias para hacernos escuchar los que todavía queremos una región en
que la honestidad, la formación, el trabajo y la ética sean valores deseados, en
lugar de este modelo actual de corrupción que, por si fuera poco, hoy además
persigue a quienes pretenden ir por otro camino en la vida, pero hay ciertos
obstáculos que debemos vencer si queremos cambiar algo de forma
democrática.
En primer lugar,
debemos lograr que personas capacitadas y honestas tengan la posibilidad de
postularse, cosa que veo bastante difícil en esta realidad política, ya que es
el mismo sistema de partidos políticos el que se encarga de que una persona así
no llegue a nada entre sus filas, ya que arruinaría el negocio de
muchos.
En segundo lugar,
deberíamos controlar fuertemente que no exista fraude electoral para manipular
los números, como ocurre en la actualidad en numerosos ámbitos controlados por
el poder.
Por último,
deberíamos lograr que la gente tenga la capacidad suficiente para analizar y
entender acabadamente lo que pasa y elegir de manera correcta, escapando a la
manipulación que en abuso del poder ejerce el sistema corrupto, a través de los
medios de comunicación que reciben millones de soles del robo de nuestros
recursos. Quizás esto es lo que vea más difícil de revertir hoy día
lamentablemente.
Aun así, si llegara a gobernar la región Lima una persona capaz y honesta, cuáles serían sus reales posibilidades en medio de un contexto de gente corrupta desplazada dispuesta a todo, cómo ya lo han demostrado en otras oportunidades, para hacer caer a quien sea, de la forma que sea, para recuperar sus posiciones de poder.
Aun así, si llegara a gobernar la región Lima una persona capaz y honesta, cuáles serían sus reales posibilidades en medio de un contexto de gente corrupta desplazada dispuesta a todo, cómo ya lo han demostrado en otras oportunidades, para hacer caer a quien sea, de la forma que sea, para recuperar sus posiciones de poder.
No tengo la fórmula
de la solución a estas cuestionas planteadas, pero entiendo que el camino se
empieza a recorrer desde la recuperación de los valores éticos por parte de la
sociedad, pese a la dedicación de la clase gobernante para que esto no ocurra,
ya que es contrario a su idiosincrasia y propios
intereses.
En resumen, creo que hay que reflexionar sobre estos temas, porque si nos quedamos solamente con el hecho de ejercer el derecho a peticionar a las autoridades que nos reconoce como ciudadanos la Constitución Política, previsto esto para un caso de gobiernos que pudieran dar alguna respuesta por estar interesados en respetar el mandato de la gente, y no para un gobierno corrupto que no tiene la más mínima intención en seguir ese camino, de nada servirán nuestras denuncias y quedaremos por años repitiendo un inocente reclamo que nunca va a ser oído.
En resumen, creo que hay que reflexionar sobre estos temas, porque si nos quedamos solamente con el hecho de ejercer el derecho a peticionar a las autoridades que nos reconoce como ciudadanos la Constitución Política, previsto esto para un caso de gobiernos que pudieran dar alguna respuesta por estar interesados en respetar el mandato de la gente, y no para un gobierno corrupto que no tiene la más mínima intención en seguir ese camino, de nada servirán nuestras denuncias y quedaremos por años repitiendo un inocente reclamo que nunca va a ser oído.
Si no hacemos
algo, tendremos un Javier Alvarado para rato o lo que es peor elegiremos uno
peor que él, aunque no creo que exista uno peor. Salvo mejor opinión.