La situación en el sector de salud es en estampida principalmente de los directores involucrados en las compras por el fenómeno del niño (situación de emergencia), y es que son pocos los que tiene espíritu de kamizake para sacrificarse por la presunta corrupción de sus antecesores.
El 24 de mayo, mediante Resolución Ejecutiva Regional N°0302- 2016 – PRES, fue designado como director ejecutivo de la red de salud Cañete Yauyos el médico Roger Juan Ramírez Roca.
Sin embargo en menos de 3 meses es relavado de su cargo, mediante la Resolución Ejecutiva Regional N°0450- 2016- PRES, del 17 de agosto, reemplazado por el médico Roberto Fernando Peña Cruz. ¿Pero qué está sucediendo realmente en el sector salud que destituyen a quienes no se someten al poder de Custodio, sin embargo en las redes más cuestionadas nunca se producen los cambios y se insisten con personajes cuestionados?
Y la respuesta es simple, el gobierno regional exige como único y principal requisito para sumir una dirección ejecutiva de una red de salud a médicos cuestionados, que no reclamen nada y que se sometan al poder de turno, es decir a médicos títeres.
De allí que estos cambios disfrazados de destitución, no son otra cosa que una represalia por negarse a sumir las consecuencias de las compras corporativas que hace el GORE, perjudicándoles y exponiéndolos con futuras denuncias administrativas y penales a directores ejecutivos.
Ya pasó en Huarochirí, y ahora en la red de salud de Cañete Yauyos. Sin embargo los álgidos problemas en el sector salud continua, con una burocracia súper Poblada, con trabajadores impagos más de 2 meses, sin medicinas, equipos médicos y sobre todo con una negligencia punible y escandalosa que pone en riesgo la salud de los pacientes.
Mientras el principal culpable, el director de la DIRESA Félix Palomo sigue intocable y protegido por las más altas esferas como Luis Custodio, de quien se dice es el que maneja el sector salud en la región Lima. Qué vergüenza.